Tuve el placer de hospedarme en este encantador hotel en Xalapa y mi experiencia fue simplemente espectacular. Desde el momento en que llegué, quedé impresionado por la apariencia de la cabaña de dos aguas, con acabados hermosos que le daban un toque de elegancia rústica.
Lo que más me cautivó fue la sensación de estar en una cabaña suiza, con la vista más increíble al bosque del Parque de los Tecajetes. La atmósfera acogedora y la amplitud del lugar crearon un ambiente perfecto para relajarme y disfrutar de la belleza natural que lo rodea.
Los detalles arquitectónicos no pasaron desapercibidos; cada rincón del hotel estaba cuidadosamente diseñado, lo que añadió un toque de sofisticación a mi estancia. Los acabados, la elección de materiales y la atención a los detalles realmente destacaron.
El servicio fue excepcional, el personal fue amable y atento, contribuyendo aún más a mi experiencia positiva. Además, las comodidades del lugar, desde las habitaciones hasta la calidad de la comida, superaron mis expectativas.
Destacaría especialmente la vista panorámica al Parque de los Tecajetes, que hizo que cada momento fuera inolvidable. Recomiendo este hotel a cualquier persona que busque una experiencia única y encantadora en Xalapa.
En resumen, mi estancia fue una mezcla perfecta de comodidad, elegancia y conexión con la naturaleza. Sin duda, volveré en mi próximo viaje a Xalapa. ¡Una joya escondida que merece ser descubierta!