No sé si será lo habitual en apartamentos en Francia pero muchas cosas nos decepcionaron. Primero que al atendernos nos piden una fianza en efectivo de 300€ (me parece excesivo por una noche que nos quedabamos). Luego nos dan el mando a distancia de la tv pero medio riendose nos dice que no sabe para que si no hablamos francés porque no hay canales españoles. Entramos en el apartamento y te encuentras las toallas y las sábanas dobladas y tienes que hacerte la cama. En el baño no hay jabón, champú ni gel, y en la cocina tampoco jabón líquido para fregar. Vamos a recepción a pedir aunque sea un jabón de manos, y nos dan 3 botecitos de champú/gel y un jaboncito, todavía con cara de extrañeza por haberlo pedido. Pero lo más extraño es que al dejar el apartamento al día siguiente tienes que quitar las sábanas de la cama y echarlas en un saco fuera junto con las toallas. El check out es demasiado pronto, a las 10.00 y te insisten en que dejes el apartamento limpio, cuando no estaba precisamente muy limpio. El inodoro no tenía apenas presión y no tragaba bien, había telarañas y polvo acumulado en bastantes zonas, el sofá tenía quemaduras en los cojines y manchas de vete a saber qué, el acceso al apartamento estaba muy oscuro,(o faltaba una bombilla o la que había tenía poca potencia). Ah, y el wifi en el apartamento era de pago. La relación calidad-precio no es la adecuada por lo que nos encontramos.