Somos 5 de familia y la experiencia en el hotel fue lo Mas cómoda, desayuno delicioso variado cada día con frutos cosechados de su propio huerto, también nos ayudaron con el servicio de lavandería, siempre pendientes de todo, las habitaciones son confortables, contacto directo con la naturaleza, se puede respirar el olor de las frutas y flores sembradas, superó nuestras espectativas, en menos de 10 minutos y por un costo de $4 del taxi se llega al puerto, volvería a repetir experiencia