Es un sitio perfecto para conocer la ciudad de Edimburgo, aunque está un poco en la zona de los alrededores de la ciudad vieja, se llega a ella en un paseo de 20 minutos, eso si, todo el camino cuesta arriba... Pero genial.
La habitación es pequeña y un poco justa, pero te ofrece lo justo para dormir y descansar unas horas antes de volver a la aventura. La cama es de 120 cms y se nota. Y el baño tiene lo justo en muy poquito espacio, pero bien. La cocina tiene también lo necesario para prepararte un desayuno o una cena, aunque eché de menos un tostador.
En cuanto a la limpieza, todo muy bien.
En cuanto al aparcamiento, si vas con coche, eso es lo más complicado, ya que es toda la zona centro, y alrededores lejanos, o solo hay parking para residentes, o zona de aparcamiento controlado que es de pago como máximo de 4 horas y es un poco rollo tener que estár pendiente cada 4h de poner un ticket. El alojamiento tiene un acuerdo con un parking privado que te hace un 45% de descuento y se te queda el dia en £15. Asi que, bueno, es una posible solución. O arriesgarte en la calle y que uno de los tantos policias de aparcamiento te pille y tengas una sustanciosa multa en tu coche.
En definitiva, lo recomiendo si no eres demasiado exigente con las comodidades. Nosotros estuvimos bien ahí.