El hotel contactó con nosotras para ofrecernos (previo pago de 15$,claro) el servicio de transfer. Confirmamos que estábamos interesadas y no aparecieron a recogernos ni nos contestaron a los mails, por lo que tuvimos que coger un taxi por 20$. Al llegar, tuvimos que esperar casi una hora en recepción a que terminaran de preparar la habitación y no nos dieron ni la clave del WiFi. La habitación estaba sucia y llena de polvo. La piscina vacía y todo el "jardín" en obras, no tenían ni duchas ni grifos para quitarse la arena después de la playa. Por la noche nos entraron en la habitación mientras dormíamos. Personal desagradable, mal comunicado. Lo único positivo, la playa cercana.