La estancia en el hotel fue buena, la habitación es amplia y cómoda, tiene parking gratuito justo delante del hotel y la wifi funciona correctamente. El desayuno está bien, es a la carta y puedes pedir lo que quieras, pero todos los platos son de estilo típico irlandés/inglés. Yo hubiera preferido un buffet libre, donde tienes más opciones de escoger. Nosotros estuvimos solo 2 noches y la variedad fue suficiente, pero si hubiéramos tenido que desayunar un tercer día, hubiera sido complicado escoger algo diferente. Para mí el único aspecto negativo es el precio de la estancia, que lo encuentro demasiado caro para el tipo de hotel.