El hotel está muy bien, y dispone de piscina y playa.
La habitación era amplia, moderna y limpia. La ducha, el lavabo y el servicio estaban separados, de manera que facilitaba su uso a las personas de la habitación. Además, había gel en la ducha y jabón en el lavabo.
El aire acondicionado funcionaba muy bien.
El armario era amplio y tenía perchas.
Los clientes tienen a su disposición toalla del hotel para usarla en la piscina y la playa.
El hotel organizaba actividades para los clientes: aquagym, gimnasia, etc.
Todo está muy limpio.
El desayuno está muy bien. Ofrece un amplio surtido de productos y todo está muy rico.
El personal es muy amable.
El wifi funciona muy bien.
El hotel tiene una extensa oferta de servicios: masajes, gimnasio, peluquería, tienda, etc.
El acceso al hotel es cómodo, si se dispone de coche, porque no está en un núcleo urbano, pero está cerca de Faliraki y de la ciudad de Rodas. También hay una parada de bus delante del hotel.
Si hay que poner alguna pega, sería que la playa no es de arena fina, sino que hay piedras, pero esto no se le puede achacar al hotel.
En definitiva, la estancia ha sido muy placentera.