El resort está bien y todos los empleados fueron excelentes. En términos de instalaciones y demás, muy bien. El bufet de desayuno estaba razonablemente bien surtido.
La pega fundamental es la cuestión de la cocina. Es un apartahotel y como tal los apartamentos tienen cocina. Sin embargo, parece que la idea fuera disuadir a los clientes de usarla para que coman en el sitio, porque la cocina no tenía ni sartén, ni microondas, ni estropajo o jabón de platos, ni sal, ni aceite, ninguna especia y tampoco cuchillos que no fueran de ensalada, con los que es difícil cortar nada. Si no te da vergüenza, puedes ir a recepción y pedir a ver si te dan y a nosotros nos dieron algunas de ellas, pero, si no, prácticamente no sirve para nada. La nevera también puede resultar bastante incómoda.