El hotel está ubicado en un entorno muy bonito, la única pisicina que tiene en los jardines está muy bien con 2 temperaturas de agua (separado en el medio por un muro). Los suite de 2 dormitorios son gigantes, para una familia de 4 sobra espacio...pero la limpieza es superficial, suelos, cocina y ventanas las dejan sucias las chicas de limpieza...además dan a la rampa del garaje del edificio y al parking exterior. El ruido matutino de los carros de lavandería es insoportable.
El desayuno es estupendo, tiene una variedad brutal. Los niños estaban encantados con la máquina de creps y los mayores con la máquina de exprimir zumo de naranja natural.
Me ha desilusionado su restaurante al mediodía, sirve comida lo que sirven al lado de la pisicna y el otro restaurante japones que tienen, solo abre por la noche. En general está bien, aunque wifi regular, pero he venido con un poco de opinión neutra...no tienen entretenimiento en el hotel, me ha sabido un poco POCO por el precio que hemos pagado, tienes que salir a la fuerza para buscar diversión con niños de 10-12 años.