Muy bien todo, el personal amable y atento. La zona esta alejada del centro pero se llega bien con bus y hay muchisimo espacio para dejar el coche fuera, nos parecio caro el parking del hotel pero la verdad no es indispensable. Alrededor hay casas, colegio y hospitales asi que es bastante silencioso y tranquilo. La habitación amplia, la cama grande y comoda. El desayuno de los mejores, variado, la fruta increiblemente fresca, gran variedad de bollería y embutidos, hay un chef preparando huevos como le pidas. Me gusto que hubiera leche sin lactosa a libre disposición (soy intolerante). Vamos a repetir sin dudas.