El desayuno tenía costo adicional al hospedaje.
El desayuno que ofrecían (aprox 7 dólares), era terriblemente grasiento, terrible en verdad: huevos mantecudos, tocino, papa rallada ultra aceitosa y salchichas más que fritas y refritas.
No había ni una miserable frutita, mucho menos verduras, ni cereal, nada nada nada saludable... Ni siquiera en el menú a la carta.
El segundo día compramos nuestro desayuno fuera del hotel, lo cual es una incomodidad.