Inicialmente reservamos en un hotel frente a la playa, con pileta, wifi, tv, etc., y al llegar nos dijeron que el hotel aún no estaba operando, nos ubicaron en otro de “los mismos dueños” un poco más alejado de la playa y sin comodidades.
Al mostrar el descontento, nos ofrecieron ir a otro hotel al norte de la isla, también de la misma cadena, a lo que accedimos enseguida.
Al llegar la decepción fue mayor, el hotel era una pensión sin playa, internet, tv, en una zona horrible y muy pobre.
Dejamos las valijas sin abrir en la habitación y salimos a caminar pensando en hasta volvernos antes. Por la playa, llegamos a un hotel con todas las comodidades que buscábamos: reposeras en la playa, un bar, pileta, etc. Nos sentamos a almorzar, activamos los datos, y vimos que ese hotel costaba lo mismo que habíamos pagado nosotros. Nos sentimos completamente estafados y decepcionados.
Decidimos llamar a hoteles.com para compartirles nuestra experiencia, y Stephany enseguida se ocupo de solucionarlo. Se comunicó con el primer hotel para ver por qué ofrecen hospedaje si aún no están operando, y con el que estábamos sentados almorzando a ver si tenían disponibilidad. En 5 minutos nos dijo que nos despreocupemos, que ya había cambiado la reserva para el hotel donde estábamos. Nos tomamos un taxi para buscar las valijas, e hicimos el check in en el hotel que si tenía todo por lo que habíamos pagado.
Hoteles.com salvo nuestras vacaciones, la pasamos increíble. Muchas gracias!!!