Es un 4* con todo incluido normalito. Es verdad que su precio es inferior a mayoría de TI de la isla, pero se nota: poca variedad en comida, aunque debo destacar que los platos 'calientes' estuvieron muy ricos (opción de pescado y carne recien hecha). Bebidas alcohólicas de muy baja calidad. Cocteles 'preparados' malos. Todo de grifo: no sólo refrescos, también zumos y VINOS! Por lo que el TI de bebidas se reduce a barra libre de cerveza.
Varias piscinas pero no muy grandes para la capacidad que tiene. En septiembre era dificil encontrar hamacas. No me quiero imaginar Agosto... Huye de la zona 1 y 2, donde la musica (especialmente regueton) está sonando a tope todo el día. Pide habitaciones en zona 3, más tranquila. PERSONAL muy amable: lo mejor del hotel. Bar de piscina siempre con colas y 1 solo camarero. Muy pocas opciones de comida fuera de horas (salchichas, hamburguesas, croquetas y napolitanas dulces). Divertida zona de chorros para niños. Se aparca facil en exterior. Recomendable la playa de Amadores y las dunas de Maspalomas (15-20 min en coche).
Tenían reservada una zona del restaurante para un grupo 'burbuja' extranjero y no gestionaron bien las mesas para el resto de turistas, con colas a horas tardías en las que la zona 'burbuja' estaba vacía.
Habitación amplia. Aconsejo planta baja por las 2 hamacas del porche. Para unos pocos días, puede ser suficiente. Para una estancia más larga, no lo recomendaría, salvo por la opción ajustada de su precio.