Se puede decir los siguientes aspectos positivos:
-La ubicación es perfecta si quieres estar cerca de la catedral, la Alcazaba, o el castillo de Gibralfaro para hacer las visitas típicas.
-La habitación es amplia, moderna y la cocina dispone de todo lo necesario para cocinar (ollas, vajillas, cubiertos....).
-El ático cuenta con tumbonas en la terraza para tomar el sol, y una mesa con sillas con vistas a la Catedral. Super....
Por otro lado:
-El agua caliente sale hirviendo y te quemas si se te ocurre poner el grifo en posición 100% caliente sin mezclarla con la fría.
- No tiene armario, únicamente "percheros para chaquetas" con una percha que resultan insuficientes si se quiere deshacer la maleta o colgar la ropa de uso diario.
- A pesar de disponer de la clave de Wifi, tras conectarse a la red, no funcionaba y no se podía navegar. Se avisó y no se solucionó durante la estancia.
- Las sabanas de una de las camas estaban rotas, con agujeros en algunas zonas, y rasgadas en un borde. Además una de las mantas contaba con numerosos lamparones de tamaño reducido y de procedencia desconocida, que producían un poco de repelús.