Un gran engaño. En las fotos parece que esta bien, pero la realidad es muy diferente. Hotel viejo, sucio, situado en un callejón, muchas de las habitaciones son interiores, y las cortinas dejan pasar toda la luz.
Lo único bueno es la situación, en unos pocos minutos te encuentras en todo el centro de la ciudad.
Si vuelvo a bruselas, trataré de buscar otro hotel, porque este fue una total decepción.