Cuando aparcamos en el hotel,los alrededores estaban llenos de basura, había hasta platos en la acera que eran del hotel. según llegue tuve un problema con la reserva que me solucionaron cambiándome de habitación ( lo cual agradezco), cuando llegue a mi apartamento estaba lleno de mosquitos, telarañas, suciedad, la de la limpieza paso una fregona, hizo las camas y dejo toallas, nada mas, cuando fuimos a cenar no teníamos bajilla para cuatro,dos tenedores una cuchara grande y una de postre,platos lo mismo ,la escoba rota.....lo comunico en recepción y me dicen que mañana va la de menaje..., Al día siguiente cuando vuelvo me encuentro mis bragas por la cama, vuelvo a recepción y me dicen que la de la limpieza no a hecho mi cama porque estaba mi ropa ( impresionante el morro de esa persona), y no deja ni un plato ni nada más,se limita a hacer la cama de los niños y dejar sábanas y toallas. Es una pena porque si los que se encargan del mantenimiento serían buenos trabajadores el hotel tendría buen aspecto porque considero que tiene instalaciones para ello, en cuanto a la ubicación ni bien ni mal ,hay un súper a 20 metros, pero si quieres coger transporte público tienes que ir en coche.