La atención sólo se puede calificar como "correcta". Demasiado interés en saber la hora exacta de llegada desde 2 días antes. Tuve aire acondicionado gracias a que era domingo, porque el lunes a las 8 de la mañana lo desconectaron. Bien ubicado respecto al centro, pero la habitación no valía ni de lejos lo que pagué por ella. El acceso al alojamiento es sólo peatonal y el aparcamiento en la zona es muy complicado, por lo que hay que sumar al precio de la habitación otros 20€ por el parking. Al final, pagas como en un 4**** pero estás en una pensión. La decoración, peculiar, a mí no gustó especialmente y la habitación yo la calificaría de mediocre, con el WC dentro de la habitación pero sólo separado por un tabique que no llegaba hasta el techo y no tenía puerta. La cama, sin somier y sobre hormigón, durísima. En definitiva, no repetiría ni por asomo.