Llegamos de Europa 10.30 pm. La señorita de recepcion solo dice que nos van a cobrar 5 % de tasa de servicio. Vamos a la habitación. Intento empezar una ducha, se inunda el baño y el agua llega a la habitación. Llamamos a recepción. Viene un señor de mantenimiento, dice que vuelve en 5 minutos. Llamamos 10 o 12 veces en 45 minutos. Al final, bajamos en shorts a recepción. La señorita se ha ido. Ahora hay un chico. El de mantenimiento esta en recepción charlando. Habla en voz baja al recepcionista. Este nos dice que cambiemos de habitación. Aceptamos. La nueva habitacion està con sabnas sucias sin cambiar, llenas de pelos. La moqueta de suelo, no se puede explicar de vomitos. Volvemos a llamar, a las 12,40 aparece un señor de limpieza. Lleva sabanas para cambiar...pero son de cama individual. Las ponemos a travès para intentar dormir. Llega un supervisor, para ayudar.Cuando ve que es imposible limpiar la habitación, sobre la 1,35 de la madrugada, nos propone un nuevo cambio. Aceptamos. Vemos que la habitación esta bien. Despues de una carrera hasta el ascensor, para alcanzar el empleado que se marchaba con el jabon que teniamos para la esperada ducha, a las 2,10 de la mañana, apagamos la luz. A las 8 de la mañana, la señora de limpieza intenta entrar para ver quien eramos y que haciamos en esta habitación. A las 9 de la mañana un cliente chino intenta abrir con su llave.... Nos vamos. Dejamos 3 escritos de protesta en el Hotel. Ni tan solo han escrito. Son despreciables