Todas la a personas que ahí laboran , en especial la sra Isabel no ayudaron en todo momento , nos enviaban el
Desayuno si así lo queríamos , a la habitación , y eran nuestros guías de turistas desde ahí , las instalaciones muy bonitas además de especiales entrabas a la habitación y parecía que estaba en ruinas por loa excelente papel tapiz que tenía , un baño pequeño pero súper funcional y una regadera de última generación con salidas de agua por diferentes mini regaderas en la pared . Por último el lugar donde se encuentra Muy tranquilo lleno de restaurantes al rededor . También estaba una chica que hablaba español y nos ayudó solo olvide pedirle su nombre , pero era una joven muy amable . Pero la sra Isabel un amor . Sin ninguna duda regresaría ahí siempre