La ubicación era excelente, llena de tiendas, restaurantes y a 2 cuadras de la Estación Central el personal fue muy amable, aunque mi francés no era muy bueno, me ayudaron en todo momento, incluso me hablaron en español, la habitación era espaciosa y agradable, tal vez un poco fría pero creo que el clima no ayudo, el desayuno estaba muy rico, era tipo buffet, muy completo, jugo, café, huevos, tocino, fruta, pan, yogurt, etc, el único punto negativo era el espacio de la regadera, no tenía un cubículo cerrado solo una cortina que quedaba super corta por lo que toda el agua se salía hacia el resto del baño y todo el baño se quedaba chorreado por la humedad, haciéndolo muy incómodo, de ahí en fuera, la verdad regresaría sin dudarlo.