En nuestro viaje por carretera entre España y Austria, hicimos escala en Divonne-les-Bains, alojándonos en este aparthotel tanto a la ida como a la vuelta, por estar a medio camino y muy cerca de la autopista. Se trataba de descansar bien, y ese es el aspecto más destacable del hotel, ya que las camas eran muy cómodas. La limpieza de la habitación del viaje de ida era mejorable (por el polvo). La del viaje de vuelta estaba más limpia y además daba a la parte posterior, donde se podían ver discurrir y oír las aguas de un riachuelo, lo que era muy relajante. Muchas facilidades de aparcamiento alrededor, y una atención ágil en recepción. Si volvemos a hacer un trayecto similar, volveríamos a alojarnos aquí.