Ha sido el peor hotel en el que me he alojado nunca. Las habitaciones parecían ambientadas en la década de los 40/50. Me arrepiento de no haber hecho fotos para mostrar lo que había realmente ya que las fotos que hay en internet son engañosas. Enseñan las habitaciones reformadas y no se aprecia el verdadero estado de las que no lo están.
Tuvimos que pedir que nos cambiaran de habitación porque la primera que nos dieron se oía un ruido eléctrico muy molesto. Para nada soy de quejarme pero no era plan no poder dormir por la noche. Así que nos asignaron otra habitación. A priori parecía que no se escuchaba nada hasta la hora de acostarse, el ruido de lo que parecía una bomba de agua era insoportable.
Lo peor, los somieres tenían pinta de ser de cuando abrió el hotel ahí por los 40, los colchones, de muelles, hacían ruido hasta con el simple respirar. Las almohadas... ahí no quedaba ni almohada, parecía que solo hubiera la funda. A las 4 de la mañana estaba tan desesperada que me quería volver a mi casa.
Los baños... no tuve coraje ni de ducharme antes de irme. Por lo menos el WC lo habían cambiado, pero tanto los azulejos, la bañera y las picas eran de cuando el hotel abrió.
Si quieres un viaje a los 40 es tu hotel, si quieres descansar por la noche, dormirás mejor en el coche.