En general, mi impresión es que los hoteles de 4 estrellas en París equivalen a 3 estrellas en otros países, por el tamaño de las habitaciones, las vistas a patios internos y limitados servicios. En este caso, mi habitación era pequeña, oscura y con vista a una pared. Por el precio, no me impresionó. La ubicación es muy céntrica y el personal amable.