Cercano a la estación. Es cierto que los alrededores están llenos de clubes y tiendas eróticas aunque salvo algún momento eventual no escuché mucho alboroto. El personal es amable y simpático, la habitación que nos tocó super limpia y muy bien presentada, la verdad es que me la esperaba peor y me sorprendió mucho para bien. Las únicas pegas que puedo ponerle son que a la planta superior no llega el ascensor, por lo que hay que bajarse en la previa y subir por las escaleras, con lo que si vas con maletas es un tostón, pero las vistas merecen la pena. Y por otro lado es que cada vez que sales y entras del hotel tienes que dejar la llave en recepción, posiblemente para evitar pérdidas y demás, aunque si sales y entras constantemente como fue nuestro caso se convierte en un tira y afloja pra ver quien la entrega/recoge para no pasar esa verguenza de ir siempre el mismo en plan salgo/entro sin parar. En general muy bien, mejor de lo que creía, y además cumplieron todos los requisitos que les puse por si podían cumplirlos, por lo que os aconsejo que si teneis preferencia por algo concreto, como es que el suelo sea de parquet/moqueta, o es mejor para vosotros planta alta/baja se lo anoteis ya que en nuestro caso fue a la perfección!!