Es un hospedaje muy bello, excelente cuidado de su infraestructura, limpio, ordenado, muy preocupada Mayra de todo lo que uno pueda necesitar. Con encargados las 24 hrs., muy cercano a la calle 23 que es una de las principales avenidas, con café, comida, cajeros automaticos y banco, para cambiar dinero, y además te permite caminar hasta el malecón sin preocupaciones. Desayuno abundante y con cariño, muy detallistas. Totalmente Recomendable, el barrio es seguro, no se dejen llevar por las apariencias.