Me gusto la ubicación, cerca a muchos lugares, centros comerciales, restaurantes y supermercados pero en auto, nada cerca caminando, muy tranquilo sus alrededores, relajante y bonito, cerca a un lago lo que te da un ambiente muy campestre, las camas muy comodas, la cocina muy bien dotada y limpian cada tres dias.
No me gusto que a pesar de que las camas son extremadamente comodas, cada habitación del primer piso tienen unos motores de aire acondicionado que no dejan dormir y el espaldar de tu cama vibra y el motor suena toda la noche.